sábado, 1 de mayo de 2010

Mundo Triangular Bizarro

Hoy desperté y me di cuenta que no seria un día normal. Cosa que percibí, porque me di cuenta que el techo de mi habitación había una filtración, de esta brotaba una especie de lava, pero una extraña lava de color verde. Me di cuenta que era lava porque este liquido lleno de odio se llevo a la muerte e infierno toda mi ropa, en un abrir y cerrar de ojos este episodio se transformo en venganza, no se porque pero tenia el presentimiento de que era mi ultimo día. El techo se desplomo encima de mi, yo un tanto perturbado saco una mano para abrir espacio y me doy cuenta que la privacidad de mi cuarto se había convertido en publico, caminé y les pregunte a los señores que no tenían boca el por que de esto. Ellos hacían atormentar mi mente,con un especie de chillido muy fuerte. Esto hizo reventar mis tímpanos, yo sabia que ellos sufrían. Me aleje, mis oídos sangraban, una silueta muy deforme se acerca a mi, no veo su cara, en el momento que toca mi brazo se hace notar que soy yo pero consumido totalmente por el liquido verdoso que ataco mi cuarto anteriormente.


El cielo se agrieta, pedazo por pedazo va cayendo. Notaba como los ángeles caían y mientras lo hacían se notaba una sonrisa hipócrita en sus caras androginas. Un hermoso cometa es la causa del cielo roto, agradezco al cometa por haberlo hecho(el de terminar con el maldito cielo vasto). Fue algo así como cuando lanzas una piedra al espejo y tu reflejo no hace mas nada que caerse, no antes en haberse convertido en un especie de demonio mutilado. Cuando el cometa aterriza se ve un hermoso destello de colores, un sonido seco y unisono invade toda la zona triangular, esto hace que duerma y descanse para siempre, al igual que todas la creaturas tanto humanas como religiosas. Una cachetada. Despierto y noto que estoy en mi habitación, no se como llegue allí después de tan emocionante evento, veo que no hay nadie, una gota de sudor frío camina con miedo por mi frente, mi corazón estaba a punto de un ataque y mi cabeza en un total colapso, las venas de mi frente latían como un caballo desbocado, corriendo lo mas rápido posible. Mi cuerpo manda la señal de que todo estará en calma, mi boca aun esta con una sonrisa paranoica. Me acuesto y entrecierro los ojos, pero.....¿que es eso? Logro observar un punto verde en mi techo. Mi mente analítica me dice dos palabras: Lava Verde. En ese momento mi techo se volvió agrietar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario