Querida perra mal nacida (si mi amada, así te gustaba que te dijera) el día de hoy te escribo porque ya no soporto tus engaños, tus mentiras y tus necesidades hacia mi. Y es que tu me volviste en un androide/humano/zombie en el que la gente me veía y se alejaba de mi, me trataban con desgano, odio, impaciencia, intolerancia y asco. Pero aun así yo sentía un amor intensamente grande por ti, fue como un flechazo, un "Rush" que corrio por mis venas, o cualquier reacción química bizarra que sucede en nuestro incomprendido cuerpo mecánico - biológico.